Si era difícil limitar un mensaje a los 140 caracteres de un tuit, compartir una historia en un video en seis segundos a través de Vine era todo un desafío.
Y aún así los usuarios de esta red social encontraron la forma de crear clips muy entretenidos y originales. mezclar diferentes tomas, combinar música y compartir momentos memorables.
Este jueves, Twitter, propietaria de Vine, anunció que en los siguientes meses desaparecerá la red social de los seis segundos.
Paradójicamente, Vine, una plataforma pionera en transmitir audiovisuales de forma inmediata, se despide en el mejor momento del video en vivo por redes con Facebook Live como estandarte.
“Gracias a todos los que vinieron a mirar y reír todos los días”, publicó el equipo de Vine a modo de despedida de sus usuarios.
La red social y la aplicación seguirá funcionando durante unos meses más y la fecha del cierre definitivo será anunciada con anterioridad para que los usuarios puedan descargar sus clips.
Amanecer y ocaso de Vine
Twitter adquirió Vine antes de que saliera al público, en 2012, por US$30 millones.
2013 fue un año muy exitoso para Vine, llegando a competir con Instagram codo a codo como la red favorita para compartir clips de video.
Sin embargo, para 2015 todo había cambiado y Twitter estaba más enfocada en su plataforma de transmisión de video en vivo Periscope.
Los expertos señalan que la tendencia en aquel momento estaba más orientada a plataformas como Periscope, Facebook Live y la emergente Snapchat.
Dos años después, el concepto de Vine ya no encajaba con los cambiantes usuarios de redes sociales.
De todas formas se debe destacar que Vine haya sobrevivido casi cuatro años como una red social de video activa entre tanta competencia enfocada en el video.
Más malas noticias para Twitter
Twitter anunció una vez más pérdidas en sus resultados, que entre enero y septiembre fueron de US$289,8 millones y también dio a conocer su intención de reducir su plantilla en un 9%.
Los resultados se hicieron públicos en medio de versiones que en las últimas semanas han dado cuenta de la posibilidad de una venta de la compañía, sin que se haya concretado ninguna operación.
La firma tiene actualmente unos 3.900 empleados.
La reestructuración, explicó Twitter en un comunicado, “se enfoca fundamentalmente en la reorganización de las ventas de la compañía, asociaciones y esfuerzos de marketing”.